Sátira del sueco Östlund y del español Aranoa triunfan gala del cine europeo
El director de cine Fernando León de Aranoa. EFE/ Luis Millan
Farandula

Sátira del sueco Östlund y del español Aranoa triunfan gala del cine europeo

Reikiavik, 10 dic (EFE).- El director español Fernando León de Aranoa se sumó hoy al olimpo de la sátira con el premio a la mejor comedia de la Academia del Cine Europeo (EFA) para su filme “El buen patrón”, en una gala en que compartió triunfos con el sueco Ruben Östlund y su “Triangle of sadness”.

“Sí, lo mío es en cierto modo una sátira. Así suelo definirlo. Y es por supuesto un honor estar en un palmarés encabezado por Östlund”, afirmó el cineasta madrileño a EFE, tras recibir su premio en la gala celebrada en el auditorio Harpa de Reikiavik.

El filme de su colega sueco ganó en esta 35 edición de los premios europeos cuatro galardones -a la mejor película, a su director, al guión y también a la mejor interpretación masculina, que fue para el croata-danés Zlatko Buric, en el papel de un recalcitrante ricacho ruso.

León de Aranoa logró su primer premio de la EFA, con una película en que Javier Bardem borda el papel de villano y que el propio director no colocaría en el género de la comedia -“tal vez porque no me gustan las comedias”, confesó-. Tampoco a su productor, Jaume Roures, le encaja el término, hasta el punto de que subió al escenario a recibirlo junto a su director, protestando entre bromas y reclamando que era un “error” y que “El buen patrón es un drama”.

“La de Östlund es una sátira anticapitalista. La mía es una película en el drama se mezcla con el humor, porque así es la vida, con la destrucción a la que arrastra la precariedad laboral a unos seres y una sociedad en su conjunto”, afirmaba, ya el cineasta con su flamante trofeo en la mano.

“El buen patrón” inscribió así el cine español en el palmarés dominado por el nórdico Östlund, en una edición en que competía por el máximo premio “Alcarrás”, de Carla Simón, mientras que Penélope Cruz lo hacía al correspondiente a mejor actriz por “Madres paralelas”, de Pedro Almodóvar.

Simón no logró sumar el premio de la EFA a su carrera de éxitos por “culpa” de su colega sueco, mientras que el galardón al que aspiraba Cruz fue para Vicky Krieps, por su revisión de “Sissi” dirigido por la austriaca Maria Kreutzer en “Corsage”.

Conforme o no con el término comedia aplicado a su película, el mero hecho de estar entre los nominados para los galardones de la EFA era para “El buen patrón” una suerte de prórroga en la secuencia de éxitos del filme, aspirante a seis de los premios Goya 2023.

Para León de Aranoa (Madrid, 1968), la historia del empresario Julio Blanco, como la del trabajador despedido que acampa ante el recinto de lo que fue su empresa es, ante todo, un drama, había enfatizado ya antes de la gala el director, en un encuentro con medios españoles.

La interpretación de Bardem es uno de los puntales para que el filme haya “viajado bien”, admitió ahí. “El humor no siempre viaja bien. Depende de muchos factores culturales, coyunturales, incluso de la idiosincrasia de un país”, reflexiona León de Aranoa.

“El buen patrón” competía por su premio con la islandesa “Cop secret”, un satírico “Thriller” dirigido por Hannes Por Halldorsson y que, por tanto, jugaba de alguna manera “en casa”. La tercera rival era la francesa “La fracture”, de Catherine Corsini, centrada en los estragos del sobrecargado sistema sanitario en una unidad de emergencias de un hospital público.

Desde su fundación en 1989, impulsada por cineastas como el alemán Wim Wenders y el sueco Ingmar Bergman, la EFA ha seguido la norma de la descentralización.

Sus premios anuales se entregan con periodicidad bianual en Berlín, sede de la academia, mientras que en los años alternos se traslada de forma rotatoria a distintas ciudades europeas. La presente edición recayó en la gélida y a la vez volcánica Islandia. Gemma Casadevall