París, 22 jul (EFE).- Los dos incendios que han quemado cerca de 21.000 hectáreas al sur de Burdeos se mantienen contenidos y tampoco han avanzado la pasada noche, pero están lejos de quedar extinguidos y aunque unas 6.000 personas que fueron evacuadas han podido volver a sus casas, quedan todavía más de 30.000.
La prefecta (delegada del Gobierno) del departamento de Gironde, Fabienne Buccio, ha explicado este viernes en una entrevista a la emisora France Info que la noche ha sido tranquila porque “el fuego por ahora sigue estando contenido”, aunque “no fijado”
Respecto a los evacuados, Buccio indicó que la vuelta a sus viviendas o a sus lugares de vacaciones se va a hacer “sector por sector” en función de la evolución de la situación, después de que unos 6.000 hayan podido hacerlo en La Teste de Buch el jueves.
La prefecta dijo entender su impaciencia, pero insistió en que “su seguridad es la prioridad”.
Desde el comienzo de los incendios el 12 de julio por la tarde, han sido desalojadas 36.750 personas de sus casas y de varios cámpings.
Se llevan contabilizadas 13.800 hectáreas de bosque de pinos calcinadas en el incendio de Landiras, al sureste de Burdeos y otras 7.000 en el de La Teste de Buch.
Alrededor de 1.800 bomberos siguen movilizados, apoyados por diversos medios aéreos. El jueves había cuatro hidroaviones Canadair, dos aviones bombarderos de agua Dash y un helicóptero bombardero de agua PUMA.