La ONU ve vital mantener la entrega de ayuda al noroeste sirio desde Turquía
El Secretario General de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, habla durante una reunión de alto nivel del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, en una imagen de archivo. EFE/EPA/Justin Lane
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La ONU ve vital mantener la entrega de ayuda al noroeste sirio desde Turquía

Naciones Unidas, 20 dic (EFE).- Mantener el suministro de ayuda humanitaria desde Turquía al último bastión rebelde del noroeste de Siria es “vital para millones de personas”, según un informe publicado este martes por la ONU, cuyo Consejo de Seguridad debe decidir si prorroga o no ese mecanismo antes del próximo 10 de enero.

Los quince países del Consejo de Seguridad acordaron el pasado julio extender por seis meses ese sistema de ayuda transfronteriza, después de que Rusia -el principal aliado del Gobierno de Damasco- vetase una resolución que lo habría prorrogado por un año, como es habitual.

Moscú defiende desde hace tiempo que lo mejor sería dejar progresivamente de entregar ayuda a la provincia de Idlib desde el exterior y pasar a canalizar toda esta asistencia desde el interior del país, lo que haría que dependa del Ejecutivo sirio.

Frente a esa postura, otros países y la propia ONU insisten en que los convoyes humanitarios deben poder seguir entrando desde Turquía para evitar un desastre entre la población de esa zona que no está bajo el control del Gobierno.

“Sin acceso transfronterizo de las Naciones Unidas al noroeste del país, aumentará el hambre, millones de personas correrán el riesgo de perder la asistencia para alojamiento y se restringirá el acceso al agua”, advierte el informe firmado por el secretario general, António Guterres.

Además, la ONU apunta que la entrega de suministros médicos se vería también muy afectada y complicaría el control de enfermedades, incluido el reciente brote de cólera en el país.

Según Guterres, “es fundamental que el Consejo de Seguridad renueve el mecanismo transfronterizo, que es vital para millones de personas”.

“Es un imperativo moral y humanitario”, insiste en el texto el jefe de Naciones Unidas, que avisa de que interrumpir esta ayuda en pleno invierno sería especialmente grave.

El Consejo de Seguridad tiene previsto discutir la cuestión en una reunión este miércoles, pero tradicionalmente las negociaciones sobre este dossier se han prolongado siempre hasta la fecha límite.

En los últimos años, la cuestión se ha convertido en toda una batalla diplomática en Naciones Unidas entre Rusia y Siria, de un lado, y una mayoría de Estados miembros, capitaneados por Estados Unidos, del otro.