París, 20 dic (EFE).- La ayuda pública al desarrollo de los países ricos de la OCDE aumentó un 8,5 % en términos reales (descontando la inflación) el pasado año, en buena medida por las donaciones para hacer frente a la compra de vacunas para la covid y otras medidas para afrontar la crisis sanitaria.
En términos absolutos, el volumen atribuido por los 29 miembros del Comité de Ayuda al Desarrollo (CAD) alcanzó una cifra récord de 185.900 millones de dólares, anunció este martes en un comunicado la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Eso supone una revisión al alza de la cifra provisional de 179.000 millones de euros que la OCDE comunicó el pasado abril y se explica principalmente por la actualización de los datos de Estados Unidos, que fue el primer contribuyente en cifras absolutas con 47.800 millones de dólares.
Los países del CAD dedicaron en conjunto 21.900 millones de dólares a la crisis del coronavirus (un 12 % del total), de ellos 11.100 millones a dispositivos de lucha contra la enfermedad (para su prevención o para el tratamiento), así como para donaciones de vacunas, ayuda humanitaria o apoyo macroeconómico.
Si se excluyeran las donaciones de vacunas, la ayuda pública al desarrollo de este grupo de países ricos habría crecido un 4,5 %.
En conjunto, la ayuda pública al desarrollo del CAD representó un 0,33 % del producto nacional bruto (PNB) de sus países miembros, muy lejos del objetivo del 0,7 % fijado por la ONU.
Únicamente cinco de los 29 países que lo componen superaron ese 0,7 %: Luxemburgo (0,99 %), Noruega (0,93 %), Suecia (0,91 %), Alemania (0,76 %) y Dinamarca (0,71 %).
Estados Unidos, con el 0,20 % del PNB, se quedó netamente por debajo de la media, igual que España, que dedicó 3.650 millones de dólares (0,26 %).